En estas temporadas invernales, por las bajas temperaturas, los resfríos y la gripe se vuelven enfermedades frecuentes. Es muy importante aprender a diferenciarlas porque la gripe es una patología que puede complicarse, en cambio el resfrío raramente tiene consecuencias, es autolimitado y dura entre 3 y 5 días.
La GRIPE puede volverse grave en niños pequeños, ancianos, embarazadas y personas jóvenes con patologías respiratorias crónicas, diabetes, obesidad, insuficiencia renal, enfermedad hepática crónica, inmunosupresión, etc. Es causada por los virus INFLUENZA, y tiene comienzo súbito, ocasiona fiebre, dolores físicos e intenso decaimiento.
Por otra parte, la gripe, es también muy contagiosa. Se transmite de persona a persona a través de las secreciones que los enfermos expulsan al toser o estornudar. Se contagie a través de las manos y, a veces, a través de objetos que hayan estado en contacto con las secreciones. Por este motivo es que el lavado de manos es fundamental en la prevención.
Una de las mejores formas para prevenirla es con la vacunación. Además de la higiene permanente de manos con agua y jabón o con alcohol en gel (si no se puede lavar las manos), y permanecer en ambientes ventilados.
Si se siente engripado no se automedique. NO USE ANTIBIOTICOS, estos no sirven para la gripe, debe hacer reposo, beber abundante líquido, en ambientes calefaccionados usar humidificador, y consultar a su médico sobre todo si la fiebre supera los 38°C que le prescribirá el antigripal adecuado. Sea responsable, evite contagiar
El RESFRIO, en cambio, puede tratarse con medicación de venta libre, consultando siempre con su farmacéutico. Mantengase hidratado, no se exija físicamente, no fume, y cúbrase la boca con el codo al estornudar.